He superado el desafió de verano, a pesar de las 20 hrs de luz en mi habitación, valió la pena.
logre cambiar/regular la temperatura y humedad durante todo su ciclo vital.
Fue interesante apañarmelas para lograr mantener el clima adecuado a pesar de ese calor agobiante de verano,
Dormir a lado de las plantas fue una experiencia intima y terapéutica que me enseño muchisimo.
Tuve la oportunidad de estudiar su crecimiento y ver como resolver cada problema que se presentaba,
Estoy satisfecho con mi resultado, cada planta me dio una cantidad considerable a pesar de ser automáticas y de tener un ciclo vital corto de dos meses.