Strain
Planta vigorosa desde el principio, me ha regalado unos densos cogollos muy olorosos y pegajosos.
Al probar esta hierba después de 3 meses de curado, me invade una ola de aromas frescos y complejos que me atrapan de inmediato. Primero siento un toque cítrico, brillante y refrescante, que rápidamente se mezcla con el olor a bosque profundo, como si caminara entre pinos después de la lluvia. Hay también un sutil dulzor de frutas y un toque acre que le da un carácter especial y envolvente.
Al dar la primera calada, el sabor es suave y agradable, con notas terrosas y frutos del bosque, que quedan en el paladar como un recuerdo dulce y persistente. La textura es perfecta: los cogollos, densos y llenos de brillantes tricomas, se muelen fácilmente y, al quemarse, desatan todos sus aromas, llenando el espacio con una fragancia deliciosa y acogedora.
Los efectos son estimulantes y despiertan mi creatividad, reflejando una influencia más cercana a las sativas. Es la compañera perfecta para comenzar el día, ofreciendo una energía vibrante que me inspira y motiva desde la mañana.
Opium es una cepa a tener en cuenta...