Strain
Sólo una Reina merece un nombre así, y como tal se ha comportado esta genuina cepa, fruto de mil soles hispanos y la obsesión de un Breeder: Mario Bellandi.
La planta no ha defraudado, siendo en todo momento la Reina indiscutible de mi jardín de sativas.
El fenotipo ha mostrado su lado más Congo, al menos el que yo tengo en el recuerdo, plantas extremadamente fuertes, con colas de gran calibre, duras como rocas y muy pegajosas, además, como regalo de despedida la plata tiñó de morados los cogollos, debido a las bajas temperaturas a la que la expuse diariamente cuando buscaba rayos de sol.
Aromas complejos, cítricos, selváticos, terrosos... espero ansioso la estabilización de los terpenos después del curado.
En dos semanas hago una cata, muy motivada...😁